Los materiales que usan los profesionales dentales son tan importantes como sus conocimientos, destrezas y experiencia en el sector. No se puede olvidar que el campo de trabajo es la boca y cualquier material no higiénico o de mala calidad puede acarrear desde una infección hasta una enfermedad. Por ello, se debe exigir siempre al dentista que trabaje con materiales de proveedores certificados como Dent Fast que han pasado el respectivo control de calidad. Si el coste del tratamiento recibido es muy barato puede ser una señal que el tipo de materiales utilizados no son de una calidad aceptable.
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Por otra parte, la calidad siempre va a proporcionar menos complicaciones en el proceso y permiten resultados mucho más estéticos y duraderos. El mismo profesional no va a trabajar con la misma confianza y seguridad sabiendo que el material que introduce en la boca de su paciente no es de una calidad certificada. Por ejemplo, una fresas defectuosas puede provocar más accidentes en la boca del paciente por muy habilidoso que sea el profesional.
No obstante, aquel material que no está conectado a la corriente sea bueno, para así evitar la corrosión o que se parta.
Hay dos ejemplos con los que se puede visualizar la mala calidad de los materiales. En el caso de la ortodoncia, malos brakets y arcos van a suponer una duración más larga del tratamiento y una mayor fricción sobre los dientes provocando un daño mayor. En otro caso, una herramienta de mala calidad en los empastes puede hacer que se desprendan del diente o que la adhesión no sea la adecuada.
En el laboratorio Dent Fast son expertos en la fabricación de implantes dentales utilizando los mejores materiales. Si necesita algunos de los productos con los que trabajamos puede llamar al 91 352 25 72 o contactar por correo a la dirección info@dentfast.com.